Como ocurre en gran parte del mundo, la industria de la logística está optimizando sus sistemas a través de la digitalización y los componentes electrónicos. En el caso de la logística de México, el impacto se está sintiendo fuerte y se espera que el sector tome un rumbo muy distinto al visto hasta ahora.
La pandemia nuevamente punto de inflexión
Si hay que analizar un momento en donde la industria sintió el sacudón y tuvo que replantearse todas sus formas de actuar, fue durante la crisis sanitaria del COVID19. A partir de ese episodio, nada fue igual. En la logística, el impacto fue aún mayor. Ante techos históricos de demanda y un servicio que tuvo que saciar los pedidos de todos los sectores del mercado, las principales empresas tuvieron que buscar nuevos métodos de optimización. Sobre todo, luego de las estadísticas alentadoras, en donde se advirtió que la actividad creció un 80% solo en 2020. 
Ante este panorama, las compañías comenzaron a implementar inteligencia artificial y el denominado Internet de las cosas. Estas dos metodologías fueron las más atractivas para lograr una rápida expansión y crecimiento empresarial. Uno de los sectores que mayores cambios demanda luego de aquel año fatídico es el de traslado de personas y la salud. Sin embargo, no hay área donde no se pidan cambios u optimizar los servicios.
El Internet de las cosas es uno de los casos emblemáticos para la industria. Se trata de un sistema de etiquetado que permite monitorear el producto a través de etiquetas de tipo inteligentes que son rastreadas bajo radiofrecuencia. Así, los métodos de procesamiento y envío se realizan en un tiempo muy inferior al establecido hasta el momento.
La robotización cambia la logística mexicana
Hasta hace un tiempo, los procesos manuales generaban grandes pérdidas de tiempo y dinero. Con la llegada de la robotización y la automatización, los resultados conseguidos mejoraron todos los indicadores posibles. Uno de ellos son los embarques o las citas con proveedores. Antes, eran actividades tediosas; mientras que hoy son simples y veloces.
Con estos cambios, la logística mexicana consigue alinearse a la tendencia mundial de optimizar el sector logístico y, de esta forma, conseguir también mayor seguridad. Con la llegada de la tecnología a este tipo de actividad, se mejoraron las formas de cuidar la mercadería. Uno de estos nuevos sistemas son los candados inteligentes que tienen la tarea de emitir alertas sonoras cada vez que son forzados o manipulados incorrectamente.
Cada una de estas mejoras fue implementada en áreas claves para la economía de México, como el transporte y la logística. Así, se genera una rueda económica en donde el crecimiento es sostenido y la logística gana terreno, al mismo tiempo que se moderniza por completo en el país.
