Según informes del Banco Mundial, Argentina ocupa el puesto 61 en eficacia de logística. Para el campo, sector clave en la economía local, es un problema enorme. Sobre todo, teniendo en cuenta que la mayor parte de los ingresos dependen del comercio exterior.
El agro argentino encuentra un obstáculo en la logística
Tras las limitaciones por el Covid19, las economías de América Latina intentan salir a flote. Sin embargo, la falta de infraestructura e inversiones se transformaron en obstáculos. Es el caso de la logística en LATAM y el agro argentino. Según el Banco Mundial, el país sudamericano ocupa el puesto 61 en eficacia de distribución y traslados de mercadería. Si se tiene en cuenta el amplio tamaño de la república, el número de campos distribuidos por distintas provincias y la necesidad de exportar, la logística se ha transformado en una traba para la economía.
Si se quiere competitividad, el sector del traslado, almacenamiento y distribución deberá optimizarse. Esto incluye tanto para cereales, carne, granos, fruta, verdura y leche, entre otros productos que dependen del transporte. Si hay que comparar con otros países de la región, Argentina corre desde atrás. Según el mismo informe del Banco Mundial, por encima se encuentran Chile, México, Brasil y Colombia. Al mismo tiempo, si se realizara solamente una estadística de Latinoamérica, Argentina quedaría en el puesto 5.
La falta de inversión e infraestructura, principal adversario de la logística argentina
Un dato curioso es que los números de inversiones e infraestructura logística en Argentina no son terminales. Incluso, tiene un promedio interesante de obras relacionadas. Aunque, está lejos de los principales actores, como Estados Unidos. Si se compara con el resto de los países a nivel global, el país del sur tiene un coeficiente de logística por encima de la media. De igual forma, está lejano a las potencias.
Un aspecto en donde sí tiene falencias y debe mejorar es según su economía. Si se miran los números del país, las obras deberían ser mayores. Es un aspecto controversial y curioso. Porque, por un lado, la estadística se ajusta a los niveles internacionales, pero por su economía debería ser aún mejor.
Para los profesionales del agro, el problema es político. Acusan de una falta de lugar en la agenda pública y que los diferentes gobiernos demoran soluciones para el sector. Todos coinciden en la necesidad de inversiones en el sector de la logística. De esta manera, el agro podría optimizar su eficacia en las entregas y los productos llegarían a destino sin todos los contratiempos que existen en la actualidad. Si la economía del país iría de la mano con las obras necesarias, el agro encontraría mejores condiciones en el mercado y competitividad en la región. Por su población y actividad comercial, Argentina debería estar arriba de la mayoría de sus pares regionales. Sin embargo, está por debajo.