La Zona Libre de Colón (ZLC) ha sido, desde su creación, uno de los principales motores del comercio en América Latina que se ha posicionado como una de las zonas francas más importantes del mundo. Y no solo por la proximidad al Canal de Panamá, sino también por la capacidad de La Zona Libre de Colón para adaptarse a los desafíos de la logística global. Empresas como Interborders Panamá han aprovechado este ecosistema logístico para transformar sus operaciones y ofrecer servicios de valor añadido a sus clientes.
Ubicación, una ventaja competitiva de la Zona Libre de Colón para la logística global
La ubicación de la Zona Libre de Colón es, sin duda, su mayor ventaja competitiva para la logística global. Al estar cerca del canal, la conexión con mercados de Asia, Europa, el Caribe y las Américas se vuelve más ágil y eficiente. Este punto de enlace permite que las mercancías lleguen a su destino en menos tiempo, lo que es clave en un mundo donde la velocidad define la competitividad. No se trata solo de un lugar de paso, sino de un espacio de almacenamiento estratégico. Empresas de logística han identificado esta oportunidad, estableciendo sus propias instalaciones en la zona para facilitar la distribución de bienes.
Interborders Panamá, por ejemplo, ha optado por abrir una bodega de 4.200 m² equipada con sistemas de almacenamiento modernos, con 2.000 posiciones de racks y áreas de temperatura controlada. Este tipo de infraestructuras permiten manejar mercancías con requisitos específicos, como alimentos o productos farmacéuticos. A esto se suma la incorporación de sistemas de seguridad avanzados, como alarmas contra incendios, que garantizan la protección de los bienes almacenados.
El impulso de la Zona Libre de Colón sigue en ascenso, y las cifras lo demuestran. En 2023, las importaciones alcanzaron los 19,7 millones de dólares, lo que representa un crecimiento del 41,1 % en comparación con 2022. De forma paralela, las reexportaciones se elevaron un 15 %, totalizando 13,3 millones de dólares. Estos números no solo evidencian la recuperación de la ZLC tras el impacto de la pandemia, sino que también reafirman su papel como puente estratégico entre Asia y América Latina.
Los beneficios fiscales y logísticos que atraen a las empresas
Una de las razones por las que la Zona Libre de Colón sigue siendo tan atractiva para las empresas de logística a nivel global es su entorno fiscal favorable. Las empresas que operan en la ZLC disfrutan de exenciones arancelarias y fiscales, lo que reduce considerablemente sus costos operativos. Este esquema permite a los negocios centrarse en su actividad principal mientras delegan la logística en agentes especializados, como Interborders Panamá.
Pero no solo se trata de impuestos. La ZLC también se ha convertido en una plataforma de servicios logísticos. Los agentes que operan en la zona no solo se encargan del transporte, sino que también gestionan el almacenamiento, la administración de inventarios y los procesos de control aduanero. Todo esto bajo un marco regulatorio que busca agilizar las operaciones y hacerlas más eficientes.
Este modelo de negocio ha facilitado la formación de alianzas estratégicas con actores clave de la cadena de suministro. La integración de puertos, ferrocarril, autopistas y un aeropuerto internacional posiciona a la Zona Libre de Colón como un nodo logístico integral. Las empresas ya no ven la ZLC solo como un punto de tránsito, sino como un centro de control y organización que agiliza la distribución de sus mercancías a nivel global.
Un modelo que impulsa la ZLC
Además, la ZLC ha sabido aprovechar los cambios en el comercio internacional. La reducción de los tiempos de tránsito, la flexibilidad en las operaciones y la posibilidad de reexportar mercancías de forma ágil son ventajas que atraen a empresas de todo el mundo. China, Estados Unidos, Brasil y México encabezan la lista de proveedores de la ZLC, mientras que Venezuela, Nicaragua, Costa Rica y Cuba son sus principales destinos de reexportación.
No es casualidad que 2.600 empresas operen en la ZLC, aprovechando esta combinación de beneficios fiscales, logísticos y de conectividad. Este modelo ha impulsado a la zona a convertirse en un hub comercial esencial para la región, donde las grandes marcas y los pequeños empresarios encuentran una plataforma para crecer.
Interborders Panamá: un caso de éxito en la ZLC
Interborders Panamá es la empresa que, en solo cinco meses de operación, ha logrado mover 1.000 contenedores y más de 2.000 TEUS (unidad de medida de contenedores) dentro de la ZLC. Este volumen de operaciones es muestra de la capacidad de la empresa para gestionar grandes flujos de mercancías en tiempo récord.
La empresa también ha sido parte activa de la Asociación de Usuarios de la ZLC, una organización que agrupa a los principales actores logísticos de la zona. Ser parte de esta asociación no solo amplía sus oportunidades de networking, sino que también le permite tener acceso a nuevos mercados y proyectos de colaboración.
Miguel Vallejos, Branch Manager de Interborders Panamá, ha resaltado que su objetivo es ser un aliado estratégico dentro de la zona franca, proporcionando un servicio de calidad y generando confianza entre sus clientes.
Interborders también ha contribuido con la creación de empleo en la región. Hasta la fecha, la empresa ha generado 25 empleos directos y planea ampliar su equipo a medida que aumente su volumen de operaciones. Este tipo de inversiones no solo dinamizan la economía local, sino que también fortalecen la capacidad logística de la Zona Libre de Colón, atrayendo a más empresas y clientes a nivel global.