China se ha posicionado como el tercer país con mayor cantidad de buques de carga en todo el mundo, ranking en el que el primer lugar lo tiene Grecia. En esta lista, el segundo a nivel global es Japón, respectivamente. Desde el inicio de la industria marítima, la demanda de grandes embarcaciones que transportan cantidades importantes de productos ha ido en ascenso. Dicha labor ha sido más fuerte gracias a la pandemia y en muchos lugares han tenido que agilizar los procesos y modernizar sus centros logísticos y de almacenaje.
Esto ha sucedido para lograr satisfacer las necesidades de los clientes a tiempo, ya que el aislamiento social ha provocado un incremento de pedidos. Gracias a las herramientas digitales y las redes sociales el comercio electrónico ha tenido la oportunidad de crecer.
En los últimos veinte años la capacidad de cada uno de los barcos se ha cuadruplicado, sin embargo, los astilleros consideran que han alcanzado sus niveles más altos. Por este motivo, es necesario realizar labores de ampliación para poder almacenar mayores cantidades en cualquiera de los puertos, así como en altamar.
El 30% del valor de todos los buques a nivel mundial pertenece a China, Grecia y Japón y al menos el 40% de la mayor capacidad de carga pertenece a estas naciones. En este sentido, son los países con mayor flujo portuario en el mundo. Hasta los momentos, China ha representado una parte importante del sector, con un total de 11,15% para finales de 2020. Se espera que para finales del próximo año estos números se incrementen, para que cada una de las empresas puedan obtener los ingresos necesarios.
Buques de carga de China benefician el almacenamiento
Durante el año en curso, China, Japón y Corea del Sur han sido líderes en astilleros, teniendo el 92,5% de la construcción de barcos. La cuota de mercado de China cayó un 5,1%. A pesar de estos números, lo cierto es que cada región se centra en comerciar con productos de distintos orígenes. Por un lado, China ha logrado mantener su participación en los buques graneleros, en los que han podido preservar importantes cantidades de productos. Los barcos de este tipo se caracterizan por poder almacenar en altamar.
De esta manera, los centros de almacenaje terrestres pueden disfrutar de un mayor espacio para cargas futuras y el flujo puede ser más continuo. Por el otro, Corea y Japón trabajan con buques petroleros, quimiqueros, gaseros y portacontenedores. Incluso cuando los índices han sido favorables a nivel general, el continente asiático se ha visto afectado por una reducción de envíos. Del mismo modo, muchas compañías han tenido que retrasar sus operaciones ya que no cuentan con los recursos necesarios.