En Chile, el aumento de ventas, al exterior, de verduras congeladas llegó a niveles impensados. La explicación más razonal a esto se debe al tipo de packaging utilizado
El 2021 y números de exportaciones a niveles récord en Chile
Al realizar la comparación anual entre las dos últimas temporadas de exportación, Chile encuentra que el 2021 tuvo mejoras significativas. Sus números indican que, durante el primer bimestre de este año, se ha vendido un 13% más de verduras congeladas al exterior. Si se traspasan estos datos a flujo de dinero, la suma de estas actividades ronda los 500 millones de dólares.
Gran parte de los productos que demanda el mundo al país trasandino son las verduras procesadas. En esta categoría entran los zumos, pastas, conservas y deshidratados. Mientras, que un 10% son verduras congeladas.
El motivo de estas mejoras en su actividad comercial por el mundo se debe al packaging y los procesos IQF. El país ha trabajado arduo para encontrar un mejor nivel de seguridad alimentaria y calidad de sus productos. A través de los procesadores empleados, se logra eliminar todo tipo de materiales extraños antes de que el producto llegue a su condición final de envasado.
En las verduras, hay dos tipos de contaminantes que son imperceptibles para el ojo humano. Estos son el EVM y la FEVM (material extraño vegetal y sustancias vegetales extrañas). Hasta hace no mucho tiempo, estas partículas eran una tarea de encontrar que se acercaba mucho a lo imposible. Sin embargo, Nimbus bsi y Tomra Food consiguieron soluciones efectivas.
La tecnología consigue mejores niveles de exportación de verduras en Chile
La manera de poder conseguir mejor calidad de productos en Chile fue combinar dos sistemas en uno. Por un lado, Nimbus BSI, que es una plataforma láser de caída libre. Por el otro, el equipo tecnológico de Tomra. El primero ofreció su tecnología láser y, el segundo, diseñó un plan efectivo. Lo que se consiguió fue un programa de escaneo y supervisión de las verduras congeladas que clasifica de una manera única. Ningún otro programa puede lograr lo que estos dos expertos han conseguido. La particularidad es que no solo sirve para clasificar un tipo de vegetal, sino para cuando están mezclados.
A través de esta innovación, se puede conseguir fácilmente una discriminación de productos aptos y no aptos. Aún cuando son similares, este proceso tiene indicadores de colores que, ante la similitud, encuentra las condiciones avaladas para ser elegidas, o no.
De esta manera, Chile consiguió aumentar su exportación de vegetales congelados. Hasta este momento, era un sector que no brindaba grandes resultados por su delicado proceso de clasificación y medidas sanitarias. Al tener este programa, la gestión se optimiza y se consigue que los países puedan comprar con total seguridad de tener un producto en condiciones.