En un movimiento estratégico que reafirma su compromiso con el mercado europeo, la cadena de distribución alimentaria Lidl ha anunciado la elección de Zaragoza como ubicación para su próximo hub logístico internacional. Desde este centro, que se construirá en una parcela de 200.000 metros cuadrados en la Plataforma Logística de Zaragoza (PlaZa), Lidl planea abastecer de sus productos a diversos países del suroeste de Europa
Un ambicioso proyecto en Zaragoza que impulsará el comercio internacional
La decisión de Lidl de establecer su hub logístico en Zaragoza no ha surgido a nivel local, sino que proviene de la sede internacional de la compañía. Aunque la empresa no ha revelado la inversión exacta para este proyecto, se estima que la cifra rondará los 100 millones de euros. Este centro logístico, que podría entrar en funcionamiento en aproximadamente cuatro años, se convertirá en un motor económico para la región, generando cientos de empleos directos e indirectos.
Cabe mencionar que desde estas nuevas instalaciones, Lidl se dedicará principalmente al abastecimiento de productos en segmentos como textil, bricolaje y juguetes. Sin embargo, hay que destacar que en esta fase inicial, la distribución de productos agroalimentarios y de alimentación quedará descartada. Este movimiento estratégico fortalecerá aún más la posición de Lidl en el mercado europeo, reforzando su capacidad logística y creando un eficiente hub logístico entre Barcelona y Zaragoza.
Impacto positivo en la Comunidad Aragonesa
Es pertinente decir que la llegada de Lidl a Zaragoza no solo representa un impulso para la economía local, sino también para toda la comunidad aragonesa. Según un informe realizado por PwC Barcelona, Lidl tiene un impacto anual en Aragón de más de 210 millones de euros en términos de contribución al Producto Interno Bruto (PIB). Además, la cadena de distribución genera más de 4.500 empleos directos, indirectos e inducidos, lo que equivale al 0,78% del total de empleos en la región.
Desde hace 29 años, Lidl ha estado presente en Aragón, expandiendo gradualmente su presencia a través de la apertura de supermercados. En la actualidad, cuenta con una red de 15 tiendas en la región, siendo la mayoría de ellas ubicadas en Zaragoza. Esta expansión ha permitido a Lidl establecer sólidas relaciones con proveedores locales, con compras anuales que superan los 200 millones de euros. Además, aproximadamente un tercio de estos productos se exportan a alrededor de 30 países, contribuyendo así al crecimiento del comercio internacional de la región.
Finalmente, hay que mencionar que fuentes de la compañía afirmaron que la elección de Zaragoza como sede para su hub logístico internacional refleja la confianza de Lidl en el potencial económico de la región. Este proyecto no solo impulsará el comercio internacional y la economía local, sino que también fortalecerá la posición de Lidl como un actor clave en el mercado europeo de distribución alimentaria.