Dos años después de la entrada en vigor del tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), para la industria de vehículos pesados. Dieron su punto de vista desde la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), quienes comentaron que el tratado fue todo un reto, pero que, finalmente, se convirtió en una oportunidad para la atracción de nuevas inversiones y la creación de fuentes de empleo.
Cabe resaltar que México es el primer exportador de tractocamiones en el mundo. Pero, además, es el quinto exportador de vehículos de carga y octavo productor de autobuses en el mundo. Y que, produce hasta 200 mil unidades anuales.
Mantener el liderazgo
Según Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la ANPACT, antes de que se firmara el acuerdo, el expresidente Donald Trump, estaba enfocado en llevar una mayor producción a Estados Unidos. Y que, por esto, una de las primeras propuestas que se hicieron en la negociación hablaba en términos estadounidenses, no tanto a nivel regional.
Además, añadió que:
“Tras varios años de negociaciones se logró una defensa de la industria, no se trataba de ganar más sino de llegar a puntos finos de la negociación para mantener el liderazgo que tenemos actualmente”.
Por su parte, Virginia Olalde, directora de Comercio Exterior y Estudios Económicos de la Asociación, dijo que lo positivo del T-MEC es que permitió mantener un comercio preferencial entre los Estados Unidos y Canadá, dado que el expresidente Trump quería evitar las negociaciones con México.
2024, un año clave para la implementación del T-MEC
Desde el 2020, la industria de vehículos pesados ha venido adaptando su cadena de suministro. Además, han implementado sistemas que le permitan cumplir con las reglas del T-MEC en términos de producción de equipos pesados, los requisitos del contenido laboral, acero y aluminio.
Han enfrentado retos que tienen que ver con la transición energética, por ejemplo. Pues más del 80% de las baterías que se utilizan en los vehículos eléctricos provienen de China.
En este sentido, Olalde comentó que 2024 será un año clave para la implementación del tratado, dado que se dará el incremento de valor de contenido regional, en todo el vehículo y en las autopartes esenciales. Es por esto por lo que resaltó que deben llegar a un valor de contenido regional del 64%, y que en 2027 se llegará al 70%.
El trabajo a futuro, según la directora, será robustecer la cadena de proveeduría en la región, pues el tratado es un instrumento que le dará certeza jurídica a las inversiones que lleguen. Pero también incentivará al sector, porque el mercado norteamericano es muy importante, dado que más del 96% de las exportaciones que se han realizado en 2022 han sido con destinos hacia Estados Unidos Y Canadá.