El mercado de logística en Colombia está experimentando los efectos del aumento constante en los precios de la gasolina, que alcanzó un valor de $600 por galón en agosto, elevando el precio del combustible a $13.564 por galón, lo que equivale a unos 3.34 dólares.
Aumento en los costos de operación: desafíos para las empresas de logística en Colombia
La escalada en los precios de la gasolina ha tenido un impacto directo en las tarifas y servicios ofrecidos por las empresas logísticas. Inter Rapidísimo, un jugador destacado en el sector que experimentó un crecimiento del 32% en el primer semestre del año, ha visto cómo el alza en el precio de la gasolina afecta las tarifas de su cartera de servicios.
La compañía, que depende de vehículos que funcionan con gasolina, también ha observado un aumento en los costos de insumos, lo que ha llevado a que los consumidores finales deban asumir parte de estos incrementos.
Al respecto, Norman Chaparro, presidente de Inter Rapidísimo, señaló que:
«Nuestras tarifas han aumentado al menos un 13% y es por el incremento en los costos de los combustibles. Los insumos para autopartes, repuestos y llantas también han subido de precio. Esto impacta el equilibrio financiero de la empresa, y para ajustarnos, tuvimos que aumentar nuestras tarifas».
Cabe mencionar que desde agosto de 2022, el sector logístico ha enfrentado una afectación evidente, como lo reveló una encuesta de la Asociación Nacional de Industriales (ANDI). Los costos logísticos y de transporte se incrementaron en un 29.7%, después de los costos de materias primas. Estas dos áreas superaron el aumento total de los costos de producción, que aumentaron alrededor del 24.3%.
Estrategias de adaptación y mitigación: hacia un futuro sostenible
Empresas como el Grupo DHL han buscado formas de lidiar con los crecientes precios del combustible. Con ingresos globales de más de $103.650 millones en 2022, DHL ha adoptado una política de adquisición de vehículos eficientes. Allan Cornejo, country manager de DHL Express Colombia, enfatizó en la importancia de la eficiencia en el consumo de combustible, expresando que buscan que el uso de combustibles fósiles sea menor y que se aseguran de que los vehículos sean productivos.
DHL también está tomando medidas a largo plazo para contrarrestar los precios del combustible. La compañía está incorporando, solo en Colombia, una flota de vehículos eléctricos, con la adquisición de 22 vehículos eléctricos adicionales durante el segundo semestre de este año. Además, planea implementar 12 aviones eléctricos a nivel mundial a partir de 2027. La inversión de DHL en este enfoque sostenible superó los $30 millones en 2022.
Por su parte, FedEx ha implementado un sistema de «recargo por combustible» que refleja directamente las fluctuaciones en los precios del combustible en sus tarifas.
Por su parte, Andrés Conchas, gerente de marketing de FedEx para la región Andina, explicó que las tarifas de la compañía se basan en sus costos. Esto garantiza transparencia: cuando suben los precios del combustible, el cliente paga más, pero cuando bajan, el envío es más económico.