Recientemente, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reveló el que el comercio electrónico de bienes y servicios ha consolidado su papel en la economía mexicana, contribuyendo con un 5.9% al Producto Interno Bruto (PIB) del país. Estos datos, basados en estadísticas de 2022, señalan un aumento significativo desde el 4.9% registrado en el año anterior, evidenciando el crecimiento constante de esta forma de comercio en el país.
El comercio electrónico en México aumento del valor agregado Bruto
El informe del Inegi también reveló que el valor agregado bruto del comercio electrónico experimentó un aumento del 36.9% en el transcurso de 2022, llegando a casi 1.75 billones de pesos, equivalentes a cerca de 102 mil 400 millones de dólares. Este aumento sugiere no solo la creciente adopción del comercio electrónico por parte de los consumidores mexicanos, sino también el impacto económico positivo que esta modalidad de negocio tiene en el país.
De este total, el 23.3% corresponde al comercio al por menor de bienes, el 19.4% a ventas mayoristas, y un significativo 57.3% a otros servicios. Estos datos revelan la diversidad de sectores que se benefician del comercio electrónico, abarcando desde la venta minorista tradicional hasta servicios digitales, consolidando su influencia en diversas áreas de la economía mexicana.
Además, el informe del Inegi destaca que estos resultados son un reflejo de la gradual recuperación económica que México ha experimentado después de los periodos de aislamiento social derivados de la pandemia. En el sector del comercio al por menor, se identifica un decrecimiento en la participación, atribuido al regreso de los consumidores a la adquisición de bienes directamente en los establecimientos físicos. Esta dinámica indica una adaptación en los hábitos de compra de los mexicanos, quienes, si bien han vuelto a las tiendas físicas, continúan aprovechando el comercio electrónico de manera significativa.
Crecimiento económico general y consumo resiliente
Además de los datos específicos del comercio electrónico, el informe proporciona una visión más amplia del panorama económico mexicano. El Producto Interno Bruto (PIB) del país experimentó un crecimiento del 3.1% en 2023, aunque ligeramente inferior al 3.9% registrado en 2022. Estos números indican una estabilización y crecimiento continuo, brindando un contexto para entender la contribución del comercio electrónico en el marco general de la economía mexicana.
En concordancia con estos indicadores, las ventas minoristas en México experimentaron un aumento notable del 8.5% en 2023, impulsadas por un consumo que se describe como «resiliente». La Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD) informó el mes pasado sobre este fenómeno, señalando la capacidad de recuperación del consumo en el país, que ha sabido adaptarse a los desafíos económicos y sociales.
Vale la pena resaltar que el informe del Inegi destaca el papel fundamental del comercio electrónico en la economía mexicana, no solo como un impulsor significativo del PIB, sino también como un indicador clave de la adaptabilidad del consumidor mexicano a las nuevas dinámicas del mercado. El crecimiento del comercio electrónico no solo ha llevado a un aumento del valor agregado bruto, sino que también ha influido en la transformación de los patrones de consumo, marcando una transición hacia una economía más digital y flexible.
