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Los planes de movilidad urbana sostenible redefinen nuestras ciudades

Los Planes de Movilidad Urbana Sostenible

La importancia de los PMUS en el panorama urbano

Los Planes de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) están protagonizando una revolución en el diseño y funcionalidad de las ciudades hispanas. Ciudades como Madrid, Barcelona, Bilbao, Vitoria-Gasteiz, Donostia y Beasain han emprendido un camino hacia una movilidad más amigable con el medio ambiente y con la vida de sus ciudadanos. En el reciente curso de verano “PMUS, Planes de Movilidad Urbana Sostenible”, organizado por el Clúster de Movilidad y Logística de Euskadi, se reunieron profesionales para discutir sus experiencias y aspiraciones.

Los PMUS no solo son planes de acción. Son proyectos estratégicos que aspiran a transformar radicalmente la forma en que percibimos y utilizamos el espacio urbano. Históricamente, estos planes han omitido los modos de movilidad según el género, causando no pocas desigualdades, pero hoy se busca ampliar su alcance hacia un espacio inclusivo.

Avances y desafíos en ciudades vascas

Donostia está implementando medidas como la peatonalización de zonas, ampliación de carriles bici, y la optimización del transporte público, con el convencimiento de disminuir el uso de coches en un 10% para desplazamientos internos. Su PMUS apunta a una ciudad más abierta y accesible para todos.

En Bilbao, la reducción de velocidad en la mayoría de sus calles desde 2018 y un plan de acción de género son ejemplos de cómo un enfoque innovador y holístico puede alterar positivamente los patrones de movilidad urbana. Se ha convertido en una ciudad donde el peatón es el rey, y casi dos tercios de los viajes se realizan a pie.

Vitoria-Gasteiz ha sido toda una pionera en la implementación de un PMUS, desde el 2008. La ciudad está en constante revisión de su movilidad, enfocándose en la mejora de la infraestructura ciclista y en integrar nuevas formas de movilidad. Aquí, cada paso se toma con detenimiento, mirando al futuro.

El caso de Beasain es único por su geografía y contexto rural-urbano. Apoyándose en el uso de datos del PMUS, fomenta políticas de movilidad compartida y activa, vital para un adecuado desarrollo tanto de su área metropolitana como de sus dimensiones rurales.

El ejemplo de grandes metrópolis: Madrid y Barcelona

Madrid y Barcelona, con sus respectivas estrategias, ofrecen un modelo a seguir para grandes urbes.

Madrid 360 se centra en la reducción del uso del vehículo privado a través de estrategias de movilidad como la electrificación y expansión del transporte público. Se proyecta un futuro donde la mezcla perfecta será de 28% en coche, 41% en transporte público, y 31% en bicicleta o a pie.

Por su parte, Barcelona persigue una movilidad segura y eficiente con su nuevo PMUS 2025-2030, que busca reducir la dependencia del coche y atraer a más usuarios hacia el transporte colectivo. Tanto la inversión en espacios públicos como la mejora de las redes de movilidad muestran un compromiso continuo de Barcelona con la sostenibilidad.

Ejecución exitosa: claves y consejos

Desde la teoría a la práctica, la ejecución es el verdadero reto. Juan Carlos Escudero y Marius Navazo subrayaron la importancia de pasar de la planificación a la acción efectiva. La implementación de un PMUS no solo requiere voluntad política y planificación, sino también adaptabilidad y participación ciudadana.

La perspectiva de género también cobró relevancia con la intervención de Noemí Vaquero. A través de la asociación WITAM, se recalca la necesidad de un enfoque que considere las diferentes realidades de hombres y mujeres en la movilidad urbana, promoviendo una igualdad que es tanto social como funcional.

Un futuro sostenible con la Movilidad Inteligente

Desde 2018, el Clúster de Movilidad y Logística de Euskadi ha impulsado estos temas, reuniendo a los profesionales del sector para discutir y preparar un futuro donde la movilidad sea cada vez más inteligente y sostenible. Este impulso hacia ciudades más habitables y modernas es clave no solo para el bienestar de los ciudadanos, sino también para el crecimiento económico sostenible del País Vasco.

La transición hacia una movilidad más sostenible y eficiente no es solo una necesidad, sino una oportunidad para redefinir nuestras ciudades y crear espacios donde realmente querramos vivir. Los PMUS son una gran herramienta en este camino, pero su éxito depende de la sinergia entre sectores público, privado y la sociedad civil. Y con este enfoque, el futuro de nuestras ciudades se ve brillantemente prometedor.